07 julio, 2013

Bárcenas, la pesadilla

 












Todo tiene una explicación muy simple, desde niño L. Barcenas ha ido guardando sus propinas familiares en su hucha del "cerdito", sin segundas, y , ya de mayor, ha seguido guardando las propinas que "tíos" de empresas varias  le han donado para mantener su buna costumbre infantil.